El proceso de recogida y fabricación del material reciclado sigue la Global Recycled Standard (GRS) 4.0, una norma internacional que garantiza que el material se recicla y manipula de la forma más respetuosa posible con el medioambiente. La inspección en tres partes verifica el origen de la materia prima y la producción responsable. El 70 % del tejido está fabricado con botellas recicladas.